Tuve la oportunidad de verlo durante el Taller de Psico-oncología, al que asistí el año pasado y que se imparte periódicamente en el Instituto Nacional del Cáncer.
En ese momento éramos doce mujeres y sólo yo, estaba sana. Las otras, tenían principalmente Ca. de mamas y de otros tipos.
Me conmovió verlas llorar al relatar su experiencia. Sin embargo, eran mujeres cuya fuerza provenía del amor por su familia y de la fe en un ser superior.
Sentí impotencia y también, admiración. Al saber que sólo les quedaba vencer a la enfermedad y mantenerse enteras durante un proceso durísimo y desgastador.
Espero que salgan triunfadoras y puedan continuar con sus vidas.
A pesar de todo, el taller -liderado por un equipo de psico-oncólogas maravillosas- muestra esta realidad como un camino de aprendizaje, dando una mirada integral y esperanzadora.
Aquí, está el enlace:
Vi el vídeo, Carlota...muy inteligente el mensaje y novedosa la forma; me gusta mucho como está quedando la página...¡Felicitaciones!
ResponderEliminarEstimados Revista la Mancha, agradezco sus valiosas palabras, ya que me animan a seguir adelante.
EliminarAfectuosamente, Carlota.